Ben Watt - Hendra (Caroline, 2014)


Ben Watt es más conocido por su periplo junto a Everything But The Girl, además de reconocido DJ, acaba de escribir un libro y ha consagrado parte de sus esfuerzos al business como alma matter de su propio sello Buzzin' Fly.
Han pasado más de treinta años desde su primer disco en solitario North Marine Drive, otro disco a recuperar y reivindicar, donde Ben Watt ya demostraba las capacidades compositivas en un ambiente puramente acústico con aportes de piano y saxo, en su día se valoró bastante, en él colaboró Robert Wyatt, ahí es nada. 

De Ben Watt poco más podría decir, menos aún de Everything But The Girl puesto que nunca fue un grupo que me llamara la atención, seguro que pueden trazarse mil y un paralelismos con su obra pasada, pero no es mi intención hacer gala hoy de mi soberana ignorancia al respecto, más bien es el típico disco al que no habría prestado atención de no haber participado Bernard Butler, ilustre ex-Suede, el que me empujó primero a detenerme en el videoclip de adelanto que me noqueó desde el primer momento y sirvió de gancho hacia el disco.

Hendra crece con las escuchas, estamos ante un gran disco, una de esas obras que aparecen sin más y que sin portadas y aseveraciones sobre la genialidad que atesora, poco a poco te va atrapando. Situado en esa delgada línea al borde del desmorone, con la muerte pululando por alguno de sus tracks, un disco de folk con todo lo que conlleva y arrastra nuestro protagonista curtido en mil batallas electrónicas, género presente aquí en los teclados y de manera tagencial, producción preciosista y armado sobre dos pilares, Bernard Butler y Ewan Pearson, o lo que es lo mismo, un toque nude/dogmanstar con producción milimétrica pero falta de grandilocuencia. Atención a David Gilmour, colaborador de lujo en este disco y que contribuye con su voz y la slide.

Hendra está inspirado en parte por la repentina muerte de su hermana, fallecida durante la grabación, hecho de calado inevitable en cada surco, pero sobretodo por el deseo de Ben Watt por dejar un tiempo el business y su buen hacer al servicio de los demás para centrarse en dar forma a todas esas cosas que quería decir, encontrar su lirismo personal sobre las palabras que tan bien domina y en un contexto musical. Nostálgia, desilusión y pérdida son las acompañantes de Watt, compañeras difíciles de soportar y más en estos tiempos de falta de calidez en el mundo si no fuera por el elemento catártico que ofrece con su fuerte carga emocional y paisajista, y con esa lluvia tan british que cala hasta el alma e invita a refugiarse armados de resignación ante las circunstancias fatales que se nos escapan y no podemos manejar en nuestras vidas.


Abre este tracklist la canción que da título, Hendra te atrapa en su languidez y preciosismo sónico, hay que admitir además las capacidades vocales de Watt, interiorismo acompañado del fingerpicking maestro de Butler con solo breve pero acertado, para partir por la mitad cualquier piedra. No todo son baladas, con un tempo más animado en Forget, Watt parece querer dar un paso al frente no sin antes dejar atrás todo aquello que tanto pesa en la mochila. Spring abre con piano en primer plano, guitarra apuntalando y Ben Watt que resultará empalagoso a quien a estas alturas espere un disco de rock, una delicia. Golden Ratio pasa desapercibida de primeras, su falta de gancho y languidez casi-lounge entra con las escuchas y a base de pillar los detalles.

Matthew Arnold's Field es de las canciones hechas para llorar, folk pastoral y paisajista que dibuja el escenario bucólico allá donde Watt esparció las cenizas de su hermana, pelos de punta. The Gun es de instrumentación preciosista, una de las grandes bazas de este disco, todos los elementos casan a la perfección en este trabajo de producción exquisita, desde la guitarra, pasando por la percusión y teclados. A la altura de Nathaniel ya es innegable la presencia de Butler, quien parece haber esperado durante tantos años a este disco para aportar esos riffs crugientes y tan característicos, aquí a sus anchas en la más rockera del disco, un acierto. The Levels es junto a la primera el highlight del disco, apoyada sobre los coros y la slide de Dabid Gilmour, una colaboración de lujo que no está aquí para lucirse, más bien rendido y totalmente al servicio de esta canción. Eso sí, a quienes esperen un folk-rock americana más típico tendrán en Young Man's Game lo más parecido a Ryan Adams, un cantó a la inseguridades de los cuarenta. Y cierra de manera correcta la balada contemplativa The Heart Is A Mirror.

Hendra me descubre a un gran songwritter que de no ser por Butler aún desconocería, incluso me invita a dar otra oportunidad al grupo que le dió éxito al menos en los discos más cercanos a este interiorismo nostálgico. No es un disco hecho para el fragor de la novedad, ni para ninguna lista anual. Su languidez no apta para rockeros puede que no te pille en el momento y te aburra, o puede hablarte como quien te mira a los ojos en la tranquilidad nocturna. Admito que es irregular en cuanto a que tiene momentos sublimes como Hendra, la que da título al disco, y The Levels, y otros momentos donde puede bajar el interés en canciones como The Gun y Golden Ratio, salvadas por el gancho de la guitarra de Butler y unos arreglos muy bien construidos, desde luego son grandes canciones a tener en cuenta, de eso no hay duda. A mi esta colección de canciones me tiene ganado. Muy buen disco.

Comentarios

  1. Me ha encantado la entrada CHALS y me ha dado un vuelco el corazón al tener buenas nuevas del señor BEN WATT. Escuché un tema en radio 3 hace unos días pero tampoco le puse mucha atención, pues me pasa como con TRACEY THORN. Los que no han conseguido capturar ese recuerdo de los tres primeros discos de EBG y de ellos dos antes de formar el dúo.
    Pero vistos los detallas que nos narras, creo que voy a escucharlo con atención. Me imagino que tras el giro tan existencial que tuvo por su grave enfermedad y ese repentino éxito en el mundillo de la electrónica. Le habrá apetecido regresar a sus orígenes para encontrarse a si mismo.
    Yo personalmente te animo a que le pegues una escucha a su primer disco en solitario en incluso al EDEN, al LOVE NOT MONEY, y al BABY THE STARS de los EVERYTHING BUT THE GIRL. Aunque para mi las dos verdaderas joyas son el disco que sacó en solitario NORTH MARINE GIRL junto a Rober Wyatt y Peter King, y el EDEN. Los dos tienen mucho Folk Y jazz, y son verdaders joyas.

    UN ABRAZO

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    1. Por supuesto lo haré con esta grata recomendación. A mi este disco me gusta cada vez más, delicioso. Saludos y gracias

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  2. Estoy de acuerdo en North Marine girl , de este nuevo como a ti no le preste la atemmnción pues los ultimos de los Everything no me habian gustado pero este que parece un disco de Roddy frame me lo escuchare con gusto

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    1. Es muy recomendable, está muy trabajado, instrumentación exquisita y canciones de gran calado. Saludos Bernardo.

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  3. Me has tomado la delantera...como imaginaras soy fan de Ben y de los EBTG de los primeros discos...su disco junto a Wyatt una maravilla...hace unos dias me tope con su libro en un mercadilloy es el perfecto compañero para escuchar este sublime Hendra...Igualmente te animo a escuchar los discos que te aconseja bboyz...Y los primeros EBTG son de escucha obligatoria.
    A+

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    1. Os haré caso, el primero de Watt cae seguro, no sé porque tenía una idea de EBTG muy centrada en la electrónica, esos tres primeros los escucharé también, gracias. Saludos master.

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  4. North Marine Drive es un disco de bossa nova inglesa, eterno, una discreta pom y con la más bella versión de You gonna make me lonesome del judio neverending.Este lo pienso escuchar porque me encanta este tío, a mi hasta la época más house tb me gustaba algo.Muy bueno Chals,estás que te sales de contagioso.

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    1. Más que contagioso, voy a chiporrotazos, como me sale. Desde luego que pararé en su obra anterior, sobre todo en el disco en solitario. respecto a EBTG, a mi el tema house me cuesta bastante. Probaré. Saludos Joserra

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  5. Me ha cautivado la acústica. Y la voz del tío es sensacional: límpia, de barítono. Me gusta. Y en la cara se da un aire a Billy Corgan.

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  6. Pues es verdad, le tiene un aire. Es un disco para cogerse despacio y con cuidado. Tiene grandes canciones. Saludos

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  7. Es prioritario que escuches el Eden de EBTG, desde luego. Ojo, que se os va la bola con el título del primero de Watt (fijaos en Joserra). Pero eso da la oportunidad de recordar que las Marine Girls (con Tracey Thorn) tienen un primer disco maravilloso (igual de maravilloso que el breve pero hermoso primero de Tracey: ¿alguien ha escuchado una Femme Fatale más delicada?). Me das un poquito de envidia, porque vas a poder descubrir, así, por sorpresa, un montón de buena música.

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    1. La verdad es que estoy atravesando una segunda juventud musical, los años en vez de ponerme orejeras, me ha hecho que escuche sin prejuicios. Por supuesto que me detendré en EBTG.

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  8. Yo escuché ambos juan manuel pereira, de echo el de Tracey Thorm lo tengo en vinilo y sinceramente me quedo con el de Ben WAtt en solitario. Lo que está claro es que es la mejor y más hermosa etapa de ambos, y después aunque me llegué a comprar el Worldwide y el Play baby the stars shine bright, los acabé encontrando demasiado "lights", (seguro que ahora me sonarían mejor). Me quedo con el EDEN y el primero de BEN WATT.

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    1. Bendito vinilo amigo, siempre mejor. De hecho estos dos que comentas seran los primeros, y yo que suerte de poder ser aconsejado con todo detalle. Saludos amigo.

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